En la Península Ibérica podemos encontrar hasta 7 especies diferentes de cangrejos de río, a saber: Astacus astacus, Astacus leptodactylus, Pacifastacus leniusculus, Procambarus clarkii, Austropotamobius italicus, Orconectes limosus y Cherax destructor.
De todas ellas únicamente Austropotamobius italicus, antes conocido como Austropotamobius pallipes, se considera autóctono de nuestros ríos (aunque últimamente hay dudas sobre este aspecto). Todas las demás han aparecido como resultado de diferentes introducciones motivadas por fines comerciales.
En cualquier caso, las tres especies más habituales y objeto de este post son: el cangrejo rojo americano (Procambarus clarkii), el cangrejo señal (Pacifastacus leniusculus) y nuestro supuesto cangrejo de río autóctono de patas blancas (Autropotamobius italicus).
¿Cómo diferenciaremos las tres especies? De una forma sencilla pero poco precisa diremos:
- Procambarus clarkii: cangrejo rojito y flaquito.
- Pacifastacus leniusculus: cangrejo marroncito-verdoso, gordete y con una mancha blanquecina-azulada en las pinzas, las cuales son de color rojizo en su parte ventral.
- Austropotamobius italicus: como el anterior pero sin esa mancha blanquecina en las pinzas.
Sin embargo, si las dudas nos acechan, podemos echar mano de esta clave de identificación sencilla:
- Color rojizo, con un espolón en la cara interna del artejo anterior al de las pinzas, éstas además son muy tuberculadas: Procambarus clarkii.
- Color marrón, verdoso, sin espolón: ver 2.
- Con una sola cresta postorbital: Austropotamobius italicus (antes A. pallipes).
- Con dos crestas postorbitales, y una mancha blanquecina característica en la cara interna de las pinzas (“señal”): Pacifastacus leniusculus.
Todos comestibles, por cierto, si bien unos más ricos que otros, jejeje… ¡que os aproveche!